Para competir con las grandes marcas internacionales y nacionales, una empresa de cerveza artesanal debe enfocarse en la eficiencia logística y en una distribución innovadora. Primero, debe aprovechar las tecnologías avanzadas, como los sistemas de gestión de la cadena de suministro y el seguimiento en tiempo real, para optimizar rutas y reducir costos. Además, es crucial establecer alianzas estratégicas con distribuidores locales que conozcan bien el mercado. La flexibilidad es otro factor clave; una empresa artesanal puede adaptarse rápidamente a cambios en la demanda y ofrecer un servicio más personalizado. También debe asegurarse de que la calidad del producto se mantenga en todo momento, implementando medidas estrictas de control durante el transporte y almacenamiento. Por último, la sostenibilidad en las prácticas logísticas puede ser un diferenciador importante, atrayendo a consumidores que valoran el impacto ambiental de sus compras.